sábado, 5 de noviembre de 2011

Campos de Golf, una lacra para la Naturaleza

Grandes superficies que deben estar en perfecto estado requieren quizá demasiada agua

Publicado inicialmente el 11/4/2006

La excesiva proliferación de macrourbanizaciones en zonas delicadas, es uno de los problemas con los que se encuentra la naturaleza hoy día, y nuestra provincia no es, ni mucho menos ajena a ellos. 
En una época en la que la sequía es evidente, los ríos no tienen apenas caudal y el que llevan está contaminado, y las restricciones para el abastecimiento de la población son evidentes, nos parece inmoral la construcción de más campos de golf cuyo mantenimiento requiere un despilfarro de agua desproporcionado. 

Resulta totalmente paradójico que mientras muchos cauces fluviales permanecen secos durante el verano, los acuíferos se encuentran sobreexplotados, como es el caso de Los Arenales, y algunos pueblos tienen que abastecerse con cisternas, se tire el agua por millones de litros en campos de golf cuyo beneficio económico sobre la población en general, es más que discutible, pero lo que sí está claro es el grave perjuicio y tremendo despilfarro de uno de los elementos básicos y primordiales para la vida no sólo de la naturaleza en general, sino del propio ser humano. 

No estamos ni mucho menos en contra del progreso, pero es necesario, de una vez por todas, que se busquen métodos de ocio alternativos a los campos de golf, que existen muchos, y desde la Administración se tomen en serio el problema del agua que, según parece no les importa apenas. 

El visto bueno a la declaración de Impacto Ambiental, desde la Consejería de Medio Ambiente, del último proyectado en Sanchidrián, nos parece inaceptable, más aún estando situado en el plan de recuperación de la cigüeña negra, y el término municipal en Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). 

También según la información aparecida en Diario de Ávila (viernes 7 de abril, página 20), para su riego se va a realizar una captación del acuífero de Los Arenales, del que está oficialmente reconocida su explotación, y se agravará la misma, y además se usará una captación del río voltoya, agravando más aún su falta de caudal y perjudicando gravemente la fauna y flora asociada. 

Seamos consecuentes y solidarios y no permitamos que mientras muchos pueblos no tienen agua para beber en verano, se esté tirando por millones de litros para que unos pocos disfruten de un delicado verdor bajo sus pies.

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